Contratos a tiempo parcial, teletrabajo y otras medidas que fomenten la conciliación de la vida laboral y personal mejoran la productividad de nuestros equipos. Pero, ¿es la flexibilidad válida para todos los sectores y empresas? Y en el caso afirmativo, ¿cómo podemos implementar este tipo de medidas en nuestro negocio?

La flexibilidad laboral está cada vez más interiorizada en las empresas españolas. Empresas como Orange, Endesa, Cepsa, Schneider Electric o Vodafone cuentan con programas específicos de flexibilidad desde hace más de una década.

Aunque todavía queda camino por recorrer, muchas empresas en nuestro país han visto cómo adoptando nuevos modelos de trabajo, como por ejemplo horarios más flexibles de entrada y salida a la oficina, mejoran la productividad de sus empleados.

A través de medidas de conciliación, las empresas se han dado cuenta de que pueden atraer talento más joven, generaciones para las que la conciliación familiar es fundamental en sus vidas.

Las nuevas tecnologías por su parte, han permitido ventajas en este sentido, como el trabajo en remoto, ofreciendo la posibilidad de trasladar la oficina a casa y organizarse el tiempo según las necesidades de cada profesional.

En medio de este panorama, según el informe de la Comisión Nacional para la Racionalización de Horarios, España es el país en el que más horas se pasa sentado en la silla de la oficina sin traducirse en mayor productividad.

Los resultados del estudio de Employer Branding Randstad Award 2018 demuestran, sin embargo, cómo los empleados en España se sienten atraídos por aquellas empresas que promueven el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y el 41 % de los empleados eligen una empresa por su flexibilidad.

Aún así, la flexibilidad laboral presenta ventajas y desventajas. Y en muchas ocasiones implementar medidas que favorezcan la flexibilidad depende del sector, del puesto de trabajo o industria.

Todos los expertos coinciden en que apostar por la flexibilidad, la conciliación y la confianza en el equipo, los profesionales estarían más motivados y satisfechos, lo que se traduciría en una mejora de sus resultados.

Pero el hecho de poder estar todo el día conectado empieza a ser peligroso para nuestra productividad porque favorece la dedicación las 24 horas al día lo cual no favorece sino complica la integración de nuestra vida laboral con nuestra vida profesional, y perjudica nuestro rendimiento.

Parece evidente que, aunque en distintos niveles de implementación y de relevancia, las organizaciones son cada vez más conscientes de que la flexibilidad les ayuda a retener talento y aumentar la productividad de sus trabajadores.

Pero, ¿cómo podemos ir implementando acciones que favorezcan la flexibilidad siempre y cuando el sector y puesto lo permita?

A continuación destacamos algunos consejos que pueden servir de ayuda:

  • Trabajar por objetivos en lugar de solo por horarios.
  • Favorecer la entrada y salida flexible para que el trabajador pueda organizarse con los asuntos personales, como las visitas al médico o atender obligaciones familiares.
  • Fomentar una cultura laboral basada en la confianza y la responsabilidad.
  • Promover la cultura flexible entre los empleados.
  • Facilitar las herramientas y tecnología necesarias para trabajar de manera flexible.

 

En Tejera Consultores, a pesar de que somos una empresa con un horario abierto al  público que nos obliga a tener unos horarios adaptados, tratamos de facilitar la conciliación familiar aplicando el horario reducido durante los meses del verano y otras fechas señaladas, como por ejemplo Navidad. Además, los miembros del equipo que tienen hijos, se flexibiliza su horario de entrada o salida de la oficina, adecuándolo al horario del colegio del menor.

¿Cuenta tu empresa con acciones de trabajo flexible? ¿Qué acciones lleváis a cabo para conseguir mayor flexibilidad laboral y conciliación familiar?